6/19/2016 6:08:39 AM | AP
Chile aplastó a México en Copa América 7-0
El pero juego para los MExicanos
USA.-
Kaput. El ensueño se colapsó en pesadilla. Los oropeles del invicto y de la solidez defensiva cayeron desde los frágiles alfileres. Chile humilla a México: 7-0.
Ojo, pudieron ser diez, pero seguramente Juan Antonio Pizzi y su tropa aspiran al Premio Nobel de la Paz con esa muestra de conmiseración y compasión hacia México.
Al final 70 mil 457 aficionados, mexicanos en su mayoría, terminaron vistiéndose la Roja y burlándose de jugadores, de Guillermo Ochoa, de cuerpo técnico y escoltando con vituperios y abucheos a la delegación del Tri, mientras unos cuantos chilenos invocaban el canto del Cielito Lindo.
Chile fue una máquina trituradora, ofensivamente inclemente, letal, despiadada, mostrando que el campeón de América, lejos de abdicar, sueña por entero con refrendar su reinado.
¿México? Fracaso absoluto. Se le ofreció jugar de local y cerró su participación en la debacle de sus actuaciones y en el colapso absoluto de un proyecto.
Curiosidad: ¿las reacciones de Rafa Márquez hacia Juan Carlos Osorio eran imprecaciones, diálogo o consejos?
LA TRAGEDIA...
Poner los grilletes primero. Para después ponerle el cascabel al gato. La herramienta de México en los escarceos con Chile.
En el asedio, Chile encuentra el 1-0 al minuto 16. En una carambola. Disparo lejano de Marcelo Díaz. La bala encuentra en las manos de Ochoa un rechace afortunado con destino desafortunado. Porque la pelota queda muerta por izquierda, donde Puch, empuja hasta con desdén.
México se encomienda al suicidio. Atacar para ser contratacado. Y Chile organiza la segunda y la tercera posibilidad de gol, cuando el 'Tri' ni siquiera saluda a Claudio Bravo.
El 'Tri' metido en la elaboración alienta a los rompimientos masivos de Chile. Cuando controla y recupera, merodea con seis la antesala en los contragolpes. Cuchillos en el área, cuchillos en el borde del área.
Descontrolado en contragolpes, Chile ve anulado el que habría sido su segundo gol, en un balón que se atravesó por terrenos de un petrificado Ochoa, pero rematado en fuera de lugar por Vargas.
En ese combate entre querer y no poder y poder, pero no querer, el 1-0 persiste, mientras Arturo Vidal granjea su ira por una amarilla.
El 2-0 era inevitable. Desatención en la zaga. Desatención o desidia. Desidia o distracción. Pero Beausejour entrega a Alexis con tiempo y espacio. Y Alexis recibe con tiempo y espacio. Y Vargas remata con tiempo y espacio. Al 44', México consulta a su agente de viajes.